Edward Brewster, portavoz de Huawei en Reino Unido:
“Esta decepcionante decisión es una mala noticia para cualquier persona en el Reino Unido que tenga un teléfono móvil. Presenta una amenaza de ralentizar el desarrollo digital de Reino Unido, aumentar los costes y profundizar la brecha digital. En lugar de subir el nivel, el gobierno está bajándolo y le instamos a que reconsidere esta decisión. Seguimos confiando en que las nuevas restricciones de los Estados Unidos no habrían afectado a la seguridad de los productos que suministramos al Reino Unido.
Lamentablemente nuestro futuro en el Reino Unido se ha politizado, ya que se trata de una cuestión de política comercial de Estados Unidos y no de seguridad. En los últimos 20 años, Huawei se ha centrado en construir un Reino Unido mejor conectado. Como empresa responsable, continuaremos apoyando a nuestros clientes como siempre lo hemos hecho.
Realizaremos una revisión detallada de lo que significa el anuncio de hoy para nuestro negocio y trabajaremos con el gobierno británico para explicar cómo podemos continuar contribuyendo a un Reino Unido mejor conectado”.